Posible huelga de Walmart Chile se centra en inteligencia artificial en el retail
28 junio 2019
Más de 17 mil trabajadores, pertenecientes a las cinco cadenas de supermercados de propiedad de Walmart en Chile, se encuentran votando la huelga, tras una negociación colectiva que no ha logrado acuerdos. Según los trabajadores, las máquinas de autoservicio y los robots reponedores están afectando sus puestos de trabajo y contabilizan en 2 mil los despidos este año relacionados con la automatización.
Esta semana el Sindicato Interempresa de Líder- Walmart (SIL), llamó a sus bases a votar la huelga legal. Durante tres jornadas, que comienzan este miércoles, cerca de 17 mil trabajadores de los supermercados Hiper Líder, Líder Express, Ekono, Acuenta y Central Mayorista a nivel nacional podrán votar a favor o en contra de la última propuesta de la empresa. De no ser aprobada, la paralización es inminente.
Según los dirigentes del sindicato, el principal punto de desacuerdo con la empresa involucra la automatización de labores diarias de los trabajadores y la multifunción que los empleados deberán asumir. Un ejemplo de ello es lo que ya está ocurriendo con los cajeros. Si en un inicio varios trabajadores se necesitaban para cumplir dicha función, ahora están siendo reemplazados por máquinas de autoservicio y sólo hay una persona para monitorear el funcionamiento de éstas y asistir a los clientes que necesitan ayuda. A la vez, ese mismo trabajador debe reponer productos y realizar otras labores administrativas.
“Para nosotros, la automatización no es el futuro, es nuestro presente”, comenta el secretario general de SIL, Francisco la Regla. Para el dirigente, la polifuncionalidad ha sido un problema para llegar a acuerdo con la empresa, así como el pago del bono de movilización para los trabajadores de supermercados Acuenta, que a diferencia de sus colegas de otros locales de Walmart Chile, no reciben dicho beneficio.
Esta será -de hecho- la primera huelga dentro de una gran empresa del retail cuyo fondo es la demanda contra la automatización tecnológica.
Para los empleados de los supermercados, la automatización -de la mano de la inteligencia artificial, la robótica y otras tendencias tecnológicas- ha ido avanzando a pasos agigantados. Todo comenzó con el autoservicio en las zonas de venta de pan y de verduras, donde las personas ya no son atendidas por trabajadores, sino que usan pesas que son operadas por los propios clientes. Luego, continuó con máquinas que barren y sacan brillo en los pasillos y con cajas de autoservicio. La automatización continúa con máquinas que hacen la labor de los reponedores, e identifican los productos que faltan en cada pasillo y -si es necesario- ordenan algún estante o góndola.
Con estas máquinas, que aún no llegan a Chile, los sindicatos calculan que la mitad de las personas que realizan labores de reposición de productos pueden ser despedidas.
“Nos pilló a todos desprevenidos, porque nosotros como trabajadores no teníamos mucha información sobre la robótica, todos los especialistas hablaban del tema digital, pero hoy vivimos en carne propia lo que significa la automatización y lo digital. Y vemos que la empresa busca bajar los costos con eso, lo que significa cortar puestos de trabajo”, opina Juan Moreno, presidente de SIL.
Según las cifras que maneja el sindicato, tan solo en 2019 ya van dos mil trabajadores despedidos en Walmart Chile por el concepto de “acomodación de jornada”, el que refleja los efectos de la automatización en el rubro. Ellos creen que a fin de año, la cifra podría alcanzar los cuatro mil.
“Estamos preocupados no sólo por nosotros, sino también porque vemos que hay silencio de parte del gobierno. La industria se está transformando y no sabemos cómo van actuar las otras empresas del retail. Nosotros tenemos toda la intención de conversar sobre el futuro del trabajo”, consigna Moreno.
Empresas de retail como Amazon ya están aplicando máquinas de empaque llamadas CartonWrap, que prontamente podrían reemplazar 1.300 trabajadores en Estados Unidos. En Chile, INTERFERENCIA informó a fines de 2018 que la banca ha tomado la iniciativa con la reducción de cerca del 1% de su personal en 2018, cifra que podría aumentar hasta la reducción de un 40% de sus trabajadores.
Walmart, a nivel mundial, facturó en 2018 US $ 500 mil millones, de los cuales las operaciones en Chile representan un poco más del 1%. Walmart Chile está en el top 10 de las empresas más grandes del país, y sus cinco supermercados representan el 40% del mercado del retail nacional. Ante estas cifras, el sindicato solicita un alza del 8% del salario, además de capacitaciones para que los trabajadores adapten su labor a la automatización de servicios y así no perder esos puestos de trabajo.
De votarse la huelga, la empresa o el sindicato pueden extender la negociación por cinco días más, proceso que se conoce como mediación obligatoria, porque ambas partes están forzadas a negociar. Pero, si no llegaran a acuerdo en esos cinco días, la empresa puede solicitar otros cinco días más de negociación, a los que el sindicato anuncia que se negará. En este caso, ya no es deber del sindicato continuar negociando y puede hacerse efectiva la paralización de los trabajadores la segunda semana de julio.
Consultados por INTERFERENCIA a través del Grupo Etcheberry, que ve las comunicaciones de Walmart Chile, la empresa no quiso dar declaraciones y solo remitió un comunicado que señala que la negociación “no ha concluído”.
“Walmart Chile reitera su más amplia disposición al diálogo con los representantes sindicales para llegar a un acuerdo que concilie las propuestas de los trabajadores y la empresa”, consigna la declaración.
Si se hace efectiva esta primera huelga contra la automatización en Chile, el sindicato anuncia la paralización de servicios en más de 100 supermercados en el país. La última paralización efectiva de trabajadores de Wallmart Chile fue en 2014 y duró 7 días, en la que la empresa logró imponer sus términos, negando alzas salariales en las magnitudes solicitadas por los trabajadores.
*Extraído de interferencia . cl
*Y la cuarentena mundial ha seguido este plan de despidos masivos, para dar paso a la automatización y virtualización de nuestras vidas y en este caso del trabajo, usando al virus como excusa para la aceptación de lo que han llamado “la nueva normalidad”.
Esto debería ser un motivo más para dejar de producir, y adentrarnos en recuperar nuestra relación con la tierra y nuestros instintos, y debido a la precariedad de la llamada masa proletaria y otrxs ke no abrazamos al trabajo como nuestro motor de vida solo nos keda seguir con una vida de informalidad y recuperación de lo ke con sangre sudor y desatención de sus cercanxs ha producido la masa proletaria. Así como sindicalismo mató al luddismo, es hora ke resucite y tme venganza. Paralizemos su megaMakinaria o nos terminará aplastando con todo y reformismos y democracias.